• Un mínimo de 2.000 disparos para los rifles.
• Un mínimo de 5.000 disparos para las escopetas de caza.
• Un mínimo de 10.000 disparos para las escopetas de tiro.
• Condiciones del test: el arma es enfriada cada 50 disparos y limpiada cada 500 disparos.
• Utilización de una variedad completa de cartuchos dentro de las diferentes marcas.
• No se permite ninguna rotura de piezas.
• Una vez concluido el test, no pueden aparecer piezas demasiado degastadas.

• El arma debe funcionar a temperaturas extremas: de -30°C a +50°C.

Todos los tests de utilización se llevan a cabo en condiciones extremas, sobradamente superiores a las normas convencionales C.I.P. La solidez y la fiabilidad que han forjado la leyenda de las armas Browning se deben en gran medida a la superación de esta serie de tests.

• Tests de sobrepresión en todas las armas.
• Tests de obstrucción en los rifles.
• Tests de seguridad: drop tests en todas las armas.

• Inspección visual de cada producto: arma + embalaje
• Mediciones sistemáticas de determinados puntos claves: cilindro, dimensiones de recámara, pesos, cotas específicas...

• Ensayos de funcionamiento manual.
• Ensayos de tiro: funcionamiento y precisión..

• Para los rifles: control muy preciso de las agrupaciones.
  
  
• Para las escopetas:
  • Test P.O.I. (Point Of Impact), que es el punto medio o el centro de gravedad del plomeo.
  • Este test se realiza a 35 metros, con encares diferentes en función de la familia del producto y de su utilización:
    • Para las escopetas superpuestas, la separación mínima entre los centros de gravedad de los 2 plomeos no debe superar los 10 cm, con una convergencia regulada a 35 m.
    • Control sistemático de la calidad de los plomeos con medios de análisis informatizado, a fin de garantizar un funcionamiento y una fiabilidad a toda prueba.